El 2004, una pareja de esposos estadunidenses observó con tristeza que muchos jóvenes se dedicaban a la delincuencia y a la prostitución porque nadie les daba oportunidades para estudiar ni para emprender. Los jóvenes, que son el futuro del país, se sentían olvidados. Por ello, el 2008, empezó el programa de becas para escolares. Desde entonces, más de 60 jóvenes en situación de pobreza y pobreza extrema han cumplido sus sueños y el de sus familias al culminar satisfactoriamente sus carreras profesionales.
Reyna Hidalgo llegó de la sierra de Áncash y ahora ya lleva más de 20 años en Chimbote. Ella, desde siempre le pedía a Dios una vida mejor. Y Dios escuchó sus súplicas y le dio la bendición llevándola hacia ACAF. Ese, para ella, fue el camino correcto. Reyna goza ahora de una vivienda digna. Gracias al área Social de ACAF y su programa “Construcción de viviendas” cumplió su sueño. Ella agradece a Dios y le reza todos los días desde una casa segura y cómoda.
Testimonios de Vidas
El verdadero rostro de la bendición
Diagnosticada con cáncer de mama, viuda y con 3 hijos que cuidar Delia Camacho nunca se dio por vencida. Desde muy joven siempre quiso lo mejor para su familia pero la vida nunca se la dio. Se cansó de tocar puertas pidiendo ayuda - todos le negaban una oportunidad. - Cuando la conocimos nos enamoramos de tan luchadora mujer. Por ello le otorgamos el mejoramiento de su hogar y la formación académica de sus hijos. Hoy Delia está a cargo del comedor 25 de mayo y se siente feliz por la oportunidad que Dios le dio.
Después de 22 años de sufrimientos tortuosos Roxana Infantes se siente bendecida y feliz de ser hoy una mujer ejemplo para sus hijos. Gracias al apoyo que se le brindó en medicamentos para el cuidado de su salud, capacitaciones en emprendimiento y el mejoramiento de su vivienda, Roxana ahora puede alardear de la tranquilidad que siente en su nuevo hogar y su próspero negocio.
Eulalia Pérez Chávez, quien hizo su propio negocio en el pueblo joven San Miguel, pudo sacar de la pobreza a sus hijos y darles estudios superiores. ¿Cómo lo hizo? Lo logró gracias al servicio de CrediAcaf. Por supuesto, ACAF siempre la mantuvo orientada para que ella haga crecer su negocio. Todo empezó con la venta de galletas y caramelos. Ahora Eulalia tiene su sala llena de abarrotes y siempre trata de satisfacer a sus clientes. Una historia admirable con final feliz gracias a ACAF.
El desgarro del dolor y la caricia de la misericordia.- Helen Quispe vive en el A.H 25 de mayo - a solo 8 minutos de Chimbote. Helen nos expresó su profundo sufrimiento al ser abandonada por su padre y no tener como ayudar a su madre con los gastos del hogar. Sin embargo gracias a su fe y paciencia ella pudo ser beneficiaria con el mejoramiento de su vivienda, y obtener el apoyo económico que deseaba para que culminé sus estudios superiores. Helen después del dolor que pasó ahora puede seguir adelante y sin dificultad.
Freyser Ruíz Aparicio sufre de asma y bronquios por ello no puede realizar trabajos que requieran esfuerzo. Limpia jardines y casas para llevar el sustento diario, pero ese dinero fue insuficiente para arreglar su humilde hogar, por ello agradeció a Dios por permitir que hoy su vivienda que por años estuvo a punto de caerse luzca renovada y más segura para toda su familia. Ahora, junto a su esposa y dos hijos, se siente más protegido gracias al apoyo de ACAF.
Un ejemplo de lucha y fe es sin duda Julio Obregozo Ríos, quien a pesar de haber sufrido un accidente de tránsito que lo dejó parapléjico, se ha vuelto en un literato importante promotor de la cultura y de la lectura para Chimbote y todo el país. Pues 9 obras publicitadas y 16 por publicar, demuestra la identificación con la tierra que lo cobija sus 77 años de edad.
Él nos cuenta que al conocer al Padre Juan Davis, su vida tomó un rumbo distinto y que gracias al apoyo brindado, ha podido superar esta situación física y ACAF continúa con esta labor social, brindándole alimentación y medicinas.
Conoce más sobre nuestro labor en este primer boletín trimestral del 2016.